Cosas de porteria

Ultimamente estoy trabajando de portero en un club privado.
He descubierto gracias a este trabajo que soy un ser con una deformidad mental mas grande de lo que pensaba.
Una de las cosas que suelo hacer pero no porque yo quiera sino porque las tías que son unas guarras me lo sirven en bandeja de plata, es cuando las chiquillas se olvidan el carnet de socio. Entonces les pido el carnet de identidad pero solo a las que están muy buenas, que a las feas es pecado. Podrían entrar igualmente diciendo su nombre y apellido, pero como además de guapas son algo gilipollas pues les digo que me dejen su DNI y luego se lo devuelvo a la salida.
Hecho esto, las tías se van a bañar a la piscina o al gimnasio y mientras tanto este jodido perverman que os relata esto toma todos los datos de la tarjeta. Nombre, edad, y sobre todo dirección.
Entonces es cuando fantaseo en ir a visitarlas a su casa. Porque se que en el fondo las putillas me dan su identificación personal porque quieren que les haga una visita a domicilio y que las haga cosas de violador.
Ya sabéis la gran estima que tengo por los violadores, estos seres que dan amor a cambio de nada y que la sociedad maltrata y castiga como si fueran malas personas.

Viernes santo sin porno

Era viernes, viernes santo. Yo como de costumbre ha eso de las 12.00 de la noche me apresure a ir a ver la peli cochina del canal plus, ya que tenia ganas de practicar mi pasatiempo favorito, la masturbación.
Cual fue mi sorpresa cuando pongo el plus y no veo chochos ni cucas por ningún lado.Entonces me dio por llamar al servicio de atención al cliente del canal.
Me sale una puta que tenia voz de ser fea, y le pregunto el porque de no poner porno esa noche.
La gachi me dice que los viernes santos no emiten porno. Yo le digo que entonces no me puedo pajear, que es lo que hago todos los viernes.La muy perra malvada hija de satanas me cuelga el teléfono.
Vuelvo a llamar y la digo que por lo menos que me haga un apaño por el teléfono, que noto que tiene voz de ser guarra, que me diga cosas impúdicas para que así me pueda pulir un poco el gajo. Me vuelve a colgar el teléfono.
Y digo yo, ¿esta es la atención al cliente que da el plus?, deja mucho que desear, habraze visto, que falta de respeto. Comprendo entonces que no voy a conseguir enamorarla con tácticas tan románticas, ya que se ve que es lesbiana.